La comarca de Txorierri ha sido testigo de un fenómeno deportivo que ha transformado la pasión por el baloncesto en una verdadera cultura. Desde su fundación hace diez años, Txorierri Basketland ha crecido de manera exponencial, convirtiéndose en un referente en la región y en Bizkaia. Este club, que comenzó con apenas 20 jugadores, ahora cuenta con más de 200, distribuidos en 17 equipos que abarcan desde los 6 hasta los 24 años. La historia de Txorierri Basketland es un testimonio del poder del trabajo en equipo y la dedicación de una comunidad que ha hecho del baloncesto una parte integral de su identidad.
La fundación del club en 2015 fue el resultado de la iniciativa de un grupo de padres y madres que compartían una profunda pasión por el baloncesto. Desde entonces, han trabajado incansablemente para construir una estructura sólida que permita a los jóvenes de la comarca disfrutar de este deporte. La presidenta del club, Itxaso Atela, quien también fue jugadora, ha sido una figura clave en este proceso. Su liderazgo y compromiso han sido fundamentales para fomentar la participación de las mujeres en el baloncesto, ya que aproximadamente el 60% de los deportistas del club son chicas.
### Crecimiento y Estructura del Club
El crecimiento de Txorierri Basketland no solo se mide en números, sino también en la calidad de la experiencia que ofrece a sus miembros. La estructura del club incluye equipos en todas las categorías, desde la escuela de iniciación para los más pequeños hasta los equipos senior. Esta diversidad permite que los niños y jóvenes no solo aprendan a jugar, sino que también desarrollen habilidades sociales y valores como el trabajo en equipo y la perseverancia.
Uno de los logros más destacados del club ha sido la creación de una escuela de baloncesto que atrae a muchos niños y niñas de la comarca. Esta escuela no solo se centra en la técnica del baloncesto, sino que también busca inculcar el amor por el deporte desde una edad temprana. Muchos de los jóvenes que se unen al club lo hacen inspirados por sus hermanos y hermanas mayores, creando un ambiente familiar que fomenta la continuidad y el compromiso.
La infraestructura del club se extiende a varios polideportivos en Derio, Sondika y Zamudio, lo que permite una mayor accesibilidad para los jugadores y sus familias. Esta distribución geográfica también ha facilitado la organización de entrenamientos y competiciones, asegurando que todos los equipos tengan la oportunidad de desarrollarse y competir en un entorno adecuado.
El impacto de Txorierri Basketland en la comunidad va más allá del ámbito deportivo. El club ha conseguido unir a familias y vecinos en torno a una pasión compartida, creando un sentido de pertenencia y comunidad. La participación activa de los padres en la organización de eventos y actividades ha sido crucial para el éxito del club. Este compromiso no solo beneficia a los jóvenes deportistas, sino que también fortalece los lazos sociales en la comarca.
Además, el club ha logrado cambiar la percepción del baloncesto en la región. Antes de su creación, los jóvenes que deseaban practicar este deporte solo podían hacerlo en centros educativos privados. Ahora, Txorierri Basketland ha democratizado el acceso al baloncesto, permitiendo que decenas de niños y niñas de diferentes orígenes puedan soñar con convertirse en jugadores profesionales. La creciente demanda de inscripciones es un claro indicador del interés que ha despertado el club en la comunidad.
La historia de Txorierri Basketland es un ejemplo inspirador de cómo la pasión y el esfuerzo colectivo pueden transformar una idea en una realidad exitosa. Con una sólida base de jugadores, entrenadores y familias comprometidas, el club está bien posicionado para continuar su crecimiento en los próximos años. La visión de sus fundadores, unida al trabajo incansable de todos los involucrados, ha permitido que el baloncesto se convierta en un pilar fundamental de la identidad de Txorierri. A medida que el club celebra su décimo aniversario, el futuro parece brillante, lleno de oportunidades para seguir inspirando a nuevas generaciones de jugadores y aficionados al baloncesto.