El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha comparecido en el Congreso para abordar el reciente apagón que afectó a toda la península. En su intervención, Sánchez ha enfatizado que no hay evidencia que vincule el apagón con un exceso de energías renovables, y ha calificado de «gigantesca manipulación» la idea de culpar a estas fuentes de energía por la crisis eléctrica.
El apagón, que se produjo el 28 de abril, dejó a millones de españoles sin suministro eléctrico durante varias horas. A pesar de la gravedad de la situación, Sánchez ha asegurado que el sistema eléctrico estaba operando con niveles de renovables inferiores a los de días anteriores, lo que contradice las afirmaciones de que la falta de nucleares fue la causa del incidente. «No hay ninguna evidencia empírica que nos diga que el incidente fuera provocado por un exceso de renovables o por la falta de centrales nucleares en España», afirmó el presidente.
Sánchez ha defendido la necesidad de continuar invirtiendo en energías verdes, argumentando que son el futuro energético del país. «Las renovables no son solo el futuro, son nuestra única y mejor opción», subrayó. En su discurso, también destacó que el Gobierno apoya las energías limpias no por ideología, sino porque es consciente de que el futuro energético de España depende de estas fuentes.
El presidente ha mencionado que no existe «ni un solo estudio serio» que respalde la idea de que las centrales nucleares son imprescindibles para el suministro energético. En cambio, ha propuesto que el futuro del suministro energético en España debe basarse en fuentes como la hidroeléctrica, la solar, la eólica y el hidrógeno verde. Además, ha señalado que las innovaciones tecnológicas permiten que las energías renovables cumplan funciones similares a las de las centrales nucleares, como la generación de inercia.
Sánchez también ha abordado la supuesta eficiencia de la energía nuclear en situaciones de crisis. Afirmó que, durante el apagón, las centrales nucleares tuvieron que ser detenidas para evitar el sobrecalentamiento de sus núcleos, y que no fueron estas centrales las que ayudaron a restaurar el suministro eléctrico. En cambio, destacó que las centrales de ciclo combinado y las interconexiones con Francia y Marruecos, así como las presas hidroeléctricas, fueron las que permitieron la recuperación del suministro.
El presidente ha criticado a aquellos que sugieren que la energía nuclear es la solución a los problemas de suministro, argumentando que sus propuestas están alineadas con intereses ideológicos y económicos de ciertas empresas del sector energético. «Es paradójico que los mismos que acusan al Gobierno de no haber dado aun con la causa del apagón lleven días recomendando una solución que, casualmente, conecta de lleno con su agenda ideológica», dijo Sánchez.
En resumen, la defensa de las energías renovables por parte de Sánchez se presenta como un pilar fundamental de su política energética, en un contexto donde la crisis del suministro eléctrico ha reavivado el debate sobre el papel de las energías nucleares en el mix energético del país. El presidente ha dejado claro que su Gobierno está comprometido con un futuro energético sostenible y que las energías renovables son la clave para lograrlo.
