La reciente instalación de una placa en honor a Ramón Baglietto en Bilbao ha conmovido a la comunidad, recordando la trágica historia de un hombre que fue víctima del terrorismo. Este acto, que tuvo lugar el 17 de mayo de 2025, reunió a su viuda, Pilar Elías, y a su hijo, Ramón, quienes expresaron su agradecimiento por el homenaje a su ser querido. Baglietto, concejal de la UCD en Azkoitia, fue asesinado por ETA el 12 de mayo de 1980, un hecho que marcó a su familia y a la sociedad en general.
La historia de Ramón Baglietto es un relato que evoca emociones intensas. Nacido en Bilbao, su vida cambió drásticamente cuando su familia se trasladó a Eibar. Desde joven, Baglietto mostró un fuerte compromiso con su comunidad, convirtiéndose en un político activo y querido. Sin embargo, su vida se vio truncada de manera violenta cuando fue asesinado a tiros por miembros de ETA, un acto que dejó una profunda huella en su familia y en la sociedad vasca.
La placa en su memoria es la duodécima que se coloca en Bilbao en recuerdo de las víctimas del terrorismo, un gesto que busca no solo honrar a los caídos, sino también fomentar la paz y la convivencia en la región. Durante la ceremonia, el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, expresó su apoyo a la familia Baglietto, asegurando que no están solos en su dolor. Este tipo de homenajes son fundamentales para mantener viva la memoria de aquellos que sufrieron a causa de la violencia y para recordar la importancia de trabajar hacia un futuro en paz.
### Un Trágico Destino
El asesinato de Ramón Baglietto no fue un hecho aislado, sino parte de una serie de atentados que marcaron la historia reciente de España. En el contexto de la lucha armada de ETA, Baglietto fue una víctima más de la violencia política que asoló el país durante décadas. Su muerte ocurrió en un momento en que la tensión política y social era palpable, y su historia se entrelaza con la de otros líderes locales que también sufrieron ataques.
El día de su asesinato, Baglietto regresaba a su hogar en Azkoitia tras una jornada de trabajo en su tienda de muebles. Aquel día, sintió que lo seguían, una sensación que había compartido con su hermano días antes. Sin embargo, la tragedia se desató cuando un grupo de etarras lo interceptó y le disparó desde otro vehículo. A pesar de que no murió de inmediato, los atacantes se aseguraron de rematarlo, un acto que refleja la brutalidad de la violencia de la época.
La historia de Baglietto se vuelve aún más trágica al conocer que, años antes de su muerte, había salvado la vida de un niño que, irónicamente, se convertiría en su asesino. Este niño, Cándido Azpiazu, fue uno de los responsables de su muerte, un giro del destino que añade una capa de dolor a la ya desgarradora narrativa. Pilar Elías, viuda de Baglietto, ha vivido con el peso de esta historia, enfrentándose a la realidad de cruzarse con el hombre que le arrebató a su esposo durante años.
### La Importancia de Recordar
La instalación de la placa en honor a Ramón Baglietto no solo es un acto simbólico, sino que también representa un esfuerzo por parte de la comunidad para recordar y aprender de su historia. En un contexto donde el terrorismo ha dejado cicatrices profundas, es esencial que las nuevas generaciones conozcan estos relatos para entender la importancia de la paz y la convivencia.
El ‘Foro Bilbao para la Paz y la Convivencia’ ha sido un actor clave en la promoción de estos homenajes, buscando crear un espacio donde las víctimas del terrorismo sean recordadas y sus historias sean contadas. Este tipo de iniciativas son fundamentales para construir una sociedad más justa y solidaria, donde el dolor del pasado no se olvide, sino que se utilice como un motor para avanzar hacia un futuro mejor.
La ceremonia de homenaje a Ramón Baglietto es un recordatorio de que, a pesar del sufrimiento, la comunidad puede unirse para rendir tributo a aquellos que han perdido la vida a causa de la violencia. La presencia de su familia en el acto, así como las palabras de agradecimiento de Pilar Elías, reflejan la necesidad de apoyo y reconocimiento que sienten las víctimas y sus seres queridos.
La memoria de Ramón Baglietto, así como la de tantas otras víctimas, debe ser un faro que guíe a la sociedad hacia la reconciliación y el entendimiento. En un mundo donde la violencia aún persiste en diversas formas, recordar a quienes sufrieron por ella es un paso esencial para construir un futuro en paz.