El FC Barcelona se coronó campeón de la Copa del Rey tras vencer al Real Madrid por 3-2 en una emocionante final que tuvo lugar en Sevilla. Este triunfo no solo representa un hito en la temporada para el equipo culé, sino que también se vio marcado por la controversia previa al partido, donde el Real Madrid decidió no presentarse a las ruedas de prensa y generó rumores sobre su participación en el encuentro.
Joan Laporta, presidente del FC Barcelona, se mostró efusivo tras la victoria y destacó la confianza de sus jugadores. En declaraciones a TV3, Laporta mencionó que los futbolistas estaban convencidos de su capacidad para ganar, resaltando su juventud e irreverencia. «Los jugadores eran los primeros convencidos de que iban a ganar la final», afirmó, subrayando el compromiso y esfuerzo del equipo.
El partido fue descrito por Laporta como un espectáculo lleno de calidad, aunque también reconoció que en una final puede suceder cualquier cosa. «La primera parte ha sido muy claramente nuestra, pero al no anotar el segundo tanto, ya se sabe, son reglas no escritas del fútbol. Hemos jugado con mucha fe», comentó el presidente, reflejando la tensión y la emoción que vivieron durante el encuentro.
Laporta también se tomó un momento para recordar a Carles Miñarro, un exjugador del Barça, quien había fallecido recientemente. Este gesto muestra la conexión emocional que el club tiene con sus exjugadores y la comunidad.
En cuanto al desplante del Real Madrid, Laporta optó por no entrar en polémicas. Afirmó que el FC Barcelona había enfocado bien la final, centrándose en el fútbol y dejando de lado las controversias. «Hemos hablado de fútbol, nuestro discurso lo hemos centrado en eso, lo otro no nos interesa y todo ha acabado como ha acabado», dijo, dejando claro que su prioridad era el rendimiento en el campo.
A pesar de la tensión previa, Laporta no escatimó en elogios hacia el Real Madrid, reconociendo que «no es fácil ganar a un Madrid herido». Esta declaración refleja el respeto que el presidente del Barça tiene por su rival, a pesar de las circunstancias.
La victoria del Barcelona en la Copa del Rey no solo es un triunfo deportivo, sino también un momento de unión para los aficionados y jugadores. Laporta enfatizó que el equipo está disfrutando de estos momentos extraordinarios y que la unión entre los jugadores es palpable. «Son muy culers, están muy unidos y están disfrutando de estos momentos extraordinarios. Podemos confiar en su compromiso y esfuerzo», concluyó.
Este triunfo en la Copa del Rey se suma a una temporada llena de desafíos y emociones para el FC Barcelona, que busca consolidar su posición en el fútbol español y europeo. La victoria ante su eterno rival no solo es un motivo de celebración, sino también un paso más hacia la construcción de un equipo competitivo y exitoso en los próximos años.
