La III Gala Desmarcadas, celebrada en el Cartuja Center CITE de Sevilla, se convirtió en un evento significativo no solo por la entrega de premios, sino también por el mensaje de concienciación que se transmitió durante la ceremonia. Este año, la gala estuvo marcada por una dedicatoria especial que resonó en el corazón de todos los asistentes, especialmente en un contexto social donde el bullying y la salud mental son temas de creciente preocupación.
### Un Tributo a Sandra Peña
La gala se tornó emotiva cuando Fede Quintero, presidente de ElDesmarque, dedicó el evento a Sandra Peña, una joven de 14 años que se suicidó en Sevilla tras sufrir bullying en su colegio. Este acto de valentía por parte de Quintero no solo fue un homenaje a la memoria de Sandra, sino también un llamado a la acción para todos los presentes. «Déjame que le dedique esta gala de hoy a Sandra Peña, que se suicidó en un colegio de Sevilla. Tenemos una responsabilidad enorme los comunicadores, deportistas, docentes, políticos, para señalar este tipo de casos de bullying», expresó Quintero, enfatizando la necesidad de visibilizar estos problemas en la sociedad actual.
La dedicatoria de Quintero fue recibida con gratitud por el padre de Sandra, quien a través de las redes sociales agradeció el gesto. «Muchísimas gracias por tu bonita dedicatoria a mi hija Sandra. Gracias de corazón», escribió José Manuel, el padre de la joven, en un mensaje que refleja la profunda tristeza y la lucha que enfrentan las familias afectadas por el bullying. Este intercambio en redes sociales subraya la importancia de la empatía y el apoyo comunitario en momentos de crisis.
### La Responsabilidad de la Sociedad
Durante su discurso, Fede Quintero también abordó la responsabilidad que tienen los adultos en la formación de un entorno más seguro para los jóvenes. «Mucho de lo que ocurre es culpa de los padres y de los mayores, que a menudo dejamos caer nuestra bilis sobre la gente en las redes. Estos son los resultados por no dar ejemplo», afirmó. Este comentario resuena con la necesidad de crear un ambiente donde los jóvenes se sientan seguros y apoyados, lejos de la crítica y el acoso.
La gala no solo fue un evento para premiar a las mujeres en el deporte, sino que se convirtió en un espacio para reflexionar sobre el impacto del bullying y la importancia de la salud mental. La visibilidad que se le dio a la situación de Sandra Peña es un paso hacia la concienciación y la acción, instando a todos a ser más responsables en sus interacciones, tanto en la vida real como en el ámbito digital.
La III Gala Desmarcadas también contó con el apoyo de diversas instituciones y empresas, como la Junta de Andalucía, LaLiga, el Ayuntamiento de Sevilla, Philips, Alcampo, Reale Seguros, Antique Theatro y Cartuja Center. Este respaldo no solo legitima la importancia del evento, sino que también muestra un compromiso colectivo hacia la mejora de la situación de las mujeres en el deporte y la lucha contra el bullying.
La gala se cerró con un mensaje de esperanza y unidad, donde se instó a todos los presentes a ser agentes de cambio. La visibilidad que se le dio a la historia de Sandra Peña es un recordatorio de que cada voz cuenta y que cada acción puede marcar la diferencia. En un mundo donde el bullying y la violencia verbal son cada vez más comunes, es crucial que todos asumamos nuestra parte de responsabilidad y trabajemos juntos para crear un entorno más inclusivo y respetuoso.
La III Gala Desmarcadas no solo celebró los logros de las mujeres en el deporte, sino que también se convirtió en un faro de esperanza y un llamado a la acción para todos. La valentía de Sandra Peña y la dedicación de su familia son un recordatorio de que debemos seguir luchando por un futuro donde todos los jóvenes puedan crecer en un ambiente seguro y libre de acoso. La gala fue un paso hacia adelante en la lucha contra el bullying y una invitación a todos a ser parte de la solución.