Un hecho insólito ha tenido lugar en Eibar, donde el partido entre el Eibar C y el Padura, correspondiente a la Tercera RFEF, ha sido suspendido debido a la necesidad de repostar un helicóptero que daba cobertura a la última etapa de la Itzulia, la famosa ronda ciclista que concluyó en el alto de Arrate.
El encuentro estaba programado para celebrarse en el campo de Unbe Inferior, pero la llegada del helicóptero, que aterrizó en el terreno de juego minutos antes del inicio del partido, obligó a las autoridades a tomar la decisión de suspender el duelo. La operación de repostaje se prolongó más de una hora, complicándose por la espera de un vehículo que transportara el combustible necesario.
Este incidente ha generado una serie de inconvenientes, especialmente para el equipo del Padura, que había llegado a Eibar con tres horas de antelación, siguiendo las recomendaciones de las autoridades para evitar que su llegada coincidiera con el final de la etapa ciclista. A pesar de sus esfuerzos por evitar problemas de tráfico, el equipo se vio afectado por la suspensión del partido, lo que ha generado malestar entre sus jugadores y cuerpo técnico.
La Itzulia, que es un evento de gran relevancia en el calendario ciclista, ha tenido un impacto directo en la programación de otros eventos deportivos en la región. Este tipo de situaciones, aunque poco comunes, resaltan la complejidad de coordinar múltiples actividades en una misma área geográfica, especialmente cuando se trata de eventos de gran afluencia de público.
Los organizadores del evento ciclista y las autoridades locales han expresado su compromiso de mejorar la planificación para evitar que incidentes como este se repitan en el futuro. La importancia de la seguridad y la logística en eventos deportivos es fundamental, y este episodio ha servido como un recordatorio de los desafíos que pueden surgir en la intersección de diferentes disciplinas deportivas.
A medida que se espera una nueva fecha para la reprogramación del partido entre el Eibar C y el Padura, los aficionados y los equipos se preparan para lo que será un encuentro que, sin duda, tendrá un aire diferente tras este inusual incidente. La comunidad deportiva de Eibar, conocida por su pasión y apoyo incondicional a sus equipos, espera que la situación se resuelva de la mejor manera posible, permitiendo que el fútbol vuelva a brillar en el campo de Unbe Inferior.