La situación geopolítica actual y las políticas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, han comenzado a influir en los patrones de viaje de los españoles hacia este país. Según las estimaciones de la Mesa del Turismo, los viajes de españoles a Estados Unidos han disminuido un 15% desde que Trump asumió la presidencia. Este descenso se produce a pesar de que la paridad entre el euro y el dólar es favorable para los turistas europeos, lo que sugiere que el fenómeno es más psicológico que económico. Juan Molas, presidente de la asociación, ha indicado que esta tendencia es coyuntural y que se espera una corrección en el mediano plazo.
A pesar de la caída en los viajes hacia Estados Unidos, no se han registrado descensos significativos en la llegada de turistas estadounidenses a España. Las proyecciones de la Mesa del Turismo para el año en curso son optimistas, aunque más moderadas en comparación con años anteriores. Se anticipa que el turismo en España crecerá un 5% durante el año, alcanzando un total de 98 millones de turistas. En términos económicos, se espera que la contribución del turismo al Producto Interno Bruto (PIB) aumente en un 3.6%, superando los 205,000 millones de euros. Esto representaría un impacto directo del 13.2% en el PIB, sin contar el 8% adicional de aportación indirecta.
El primer cuatrimestre del año ha mostrado resultados positivos, gracias a los sólidos datos de ocupación en los principales destinos turísticos durante la Semana Santa. La Mesa del Turismo ha informado que la ocupación turística durante esta festividad ha mejorado en un 6% en comparación con la Semana Santa de 2024. Además, se prevé que el periodo de enero a abril registre un incremento del 5% respecto al año anterior. Las previsiones indican un crecimiento leve del turismo nacional del 1.2%, mientras que el turismo internacional experimentará un aumento más significativo del 4.5%.
En cuanto a las expectativas para la primavera y el verano, Molas ha expresado un optimismo considerable, citando un volumen de demanda muy importante para los meses de mayo y junio. Este aumento en la demanda se observa tanto en el mercado nacional como en los principales mercados europeos. En particular, se ha notado un interés creciente en el turismo proveniente de países como el Reino Unido, Alemania, Francia e Italia. Además, se están abriendo nuevas oportunidades en mercados emergentes, incluyendo Eslovenia, Polonia, Chequia, Colombia, México, China, Japón y Corea del Sur.
La combinación de factores como la incertidumbre política y las condiciones económicas puede influir en las decisiones de viaje de los turistas. En el caso de los españoles que planean visitar Estados Unidos, la percepción de un ambiente hostil o poco acogedor puede ser un factor determinante en su decisión de no viajar. Esto resalta la importancia de la imagen que proyecta un país en el ámbito internacional y cómo esta puede afectar su industria turística.
Por otro lado, el turismo en España sigue siendo un pilar fundamental de la economía. La capacidad del país para atraer turistas de diversas nacionalidades es un testimonio de su atractivo como destino. Las autoridades y organizaciones del sector turístico están trabajando para mantener y aumentar esta atracción, implementando estrategias que fomenten la llegada de visitantes y mejoren la experiencia del turista.
En resumen, aunque la incertidumbre geopolítica y las políticas de Trump han impactado negativamente en los viajes de españoles a Estados Unidos, el turismo en España se mantiene robusto y en crecimiento. Las proyecciones para el año son alentadoras, y se espera que la industria turística continúe desempeñando un papel crucial en la economía del país. La capacidad de adaptación y la respuesta a las tendencias del mercado serán clave para el futuro del turismo en España, así como la gestión de la percepción internacional del país como un destino seguro y acogedor para los viajeros.