Iberdrola ha anunciado un notable beneficio de 5.307 millones de euros hasta septiembre de 2024, lo que representa un incremento del 17% en comparación con el mismo periodo del año anterior, excluyendo elementos atípicos como desinversiones y deducciones. Este crecimiento se ha visto impulsado por un aumento significativo en las inversiones, el sólido desempeño del negocio de redes y la implementación de nuevos marcos regulatorios que han favorecido su operativa. La compañía ha realizado inversiones por un total de 9.000 millones de euros, de los cuales más del 60% se han destinado a proyectos en Reino Unido y Estados Unidos.
**Inversiones en Redes y Generación Renovable**
El enfoque de Iberdrola en el sector de redes ha sido evidente, con un 55% de sus inversiones dirigidas a este ámbito. En los primeros nueve meses del año, la empresa ha destinado aproximadamente 4.904 millones de euros a la expansión y mejora de sus redes eléctricas, lo que representa un incremento del 12% en comparación con el año anterior. Esta estrategia ha permitido que la base de activos de redes eléctricas de la compañía alcance los 49.300 millones de euros, también con un crecimiento del 12% en relación al mismo periodo del año pasado.
En el sector de generación y atención al cliente, Iberdrola ha invertido 3.442 millones de euros, lo que ha resultado en la instalación de más de 2.000 MW de capacidad renovable en el último año. De esta inversión, el 60% se ha canalizado hacia proyectos en Reino Unido y Estados Unidos, reflejando la importancia de estos mercados en la estrategia global de la empresa. Además, Iberdrola cuenta actualmente con 5.500 MW en construcción y 8.500 MW en fases avanzadas de desarrollo, lo que le permitirá responder a un posible aumento en la demanda energética en el futuro.
**Resultados Financieros y Proyecciones**
El beneficio bruto de explotación (Ebitda) de Iberdrola alcanzó los 12.438 millones de euros, lo que representa un crecimiento del 4,4% en comparación con el año anterior. Un dato relevante es que el 83% de este Ebitda proviene de países con alta calificación crediticia, destacando que la contribución de Reino Unido y Estados Unidos ha aumentado en 12 puntos básicos, alcanzando el 43% del total. En términos de resultados operativos, el área de redes ha experimentado un aumento del 26%, gracias a las inversiones realizadas y a los nuevos marcos regulatorios que han beneficiado su funcionamiento.
Sin embargo, el Ebitda del área de producción renovable y atención al cliente ha visto una caída del 11%, atribuida a desinversiones y al aumento de costos de servicios complementarios en la Península Ibérica. A pesar de estos desafíos, la compañía ha logrado reducir su deuda neta en 3.200 millones de euros en los primeros nueve meses del año, situándose en alrededor de 48.500 millones de euros. Esta reducción se ha logrado gracias a una política efectiva de rotación de activos y alianzas estratégicas.
Con estos resultados, Iberdrola ha propuesto un dividendo récord de al menos 0,25 euros por acción, lo que representa un incremento del 8,2% respecto a los primeros nueve meses de 2024. Este dividendo se complementará con otro que deberá ser aprobado en la próxima Junta General de Accionistas, y se espera que sea abonado en el tercer trimestre de 2026. La compañía también ha establecido una previsión de beneficio para el conjunto del ejercicio de 6.600 millones de euros, con un resultado neto que superará los 6.200 millones, excluyendo 389 millones de euros ya cobrados por costos pasados de redes en Estados Unidos.
Iberdrola continúa consolidándose como un actor clave en el sector energético, con un enfoque claro en la sostenibilidad y la innovación, lo que le permite adaptarse a las demandas del mercado y a los desafíos regulatorios. Su sólida estrategia de inversión y su compromiso con la generación de energía renovable son pilares fundamentales para su crecimiento futuro.
