En los últimos años, el sector turístico ha cobrado una importancia significativa en la economía de Catalunya, generando tanto beneficios como desafíos. Recientemente, un grupo de economistas catalanes ha planteado la posibilidad de eliminar las subvenciones fiscales al turismo, específicamente a través del IVA reducido, lo que ha desatado un intenso debate en la comunidad. Esta propuesta busca abordar las externalidades negativas que ha traído consigo el crecimiento del turismo, así como fomentar el desarrollo de sectores alternativos que puedan ofrecer empleos más estables y menos precarios.
La discusión se inició en la jornada anual del Col·legi d’Economistes, donde el catedrático Josep Oliver argumentó que la actual política de subvenciones al sector de la hostelería y otros servicios relacionados con el turismo está incentivando un crecimiento desmedido de esta actividad. Según Oliver, el IVA reducido del 10% que se aplica a la hostelería es significativamente menor que el 21% que se aplica a otras actividades, lo que hace que Catalunya sea un destino atractivo para los turistas extranjeros. Esta situación, a su juicio, podría estar contribuyendo a la desindustrialización de la región, un fenómeno que ha llevado a Catalunya a depender cada vez más de los servicios en detrimento de la industria.
### La Desindustrialización y sus Consecuencias
La desindustrialización en Catalunya ha sido un proceso gradual pero alarmante. En 1977, el 40,6% de los ocupados en la región trabajaban en el sector industrial, pero para el año 2000 esa cifra había caído al 29%, y en 2024 se estima que solo el 16,6% de los trabajadores se dedican a la industria. Este cambio ha llevado a una economía más terciarizada, donde el turismo y los servicios dominan el panorama laboral. Aunque el turismo puede ser una fuente rápida de empleo, la actual tasa de desempleo en Catalunya, que se sitúa en un 8,2%, indica que la necesidad de incentivar el turismo ya no es tan urgente como en el pasado.
La propuesta de revisar las subvenciones fiscales al turismo ha encontrado tanto apoyo como oposición. Algunos economistas, como Guillem López-Casasnovas y Miquel Puig, han respaldado la idea de un endurecimiento de la fiscalidad en este sector. Sin embargo, otros han expresado su preocupación por el impacto que esto podría tener en el empleo y la actividad económica. La reacción de las patronales y sindicatos ha sido casi inmediata, con un rechazo contundente a cualquier medida que pueda afectar negativamente al sector turístico.
### Reacciones del Sector Turístico
Las organizaciones que representan al sector turístico han reaccionado con indignación ante la propuesta de eliminar las subvenciones fiscales. Argumentan que el turismo ha sido un motor clave para la economía española, contribuyendo significativamente al crecimiento del PIB en los últimos años. Según datos de Exceltur, el turismo ha representado el 52,6% del aumento del valor añadido real en España entre 2021 y 2024. Esta contribución ha llevado a muchos en el sector a considerar que las propuestas de aumentar la fiscalidad son una falta de reconocimiento a su papel en la economía.
Óscar Perelli, vicepresidente ejecutivo de Exceltur, ha defendido que el turismo no solo genera empleo, sino que también tiene un efecto arrastre sobre otros sectores, como el textil y la tecnología. Además, ha señalado que el sector ya asume una carga fiscal significativa, incluyendo la tasa turística en Catalunya. Por su parte, Roger Pallarols, director del Gremi de Restauració de Barcelona, ha manifestado que la propuesta se aleja de la realidad económica del sector, que ha demostrado ser resiliente y capaz de adaptarse a los cambios.
La discusión sobre la fiscalidad del turismo también ha puesto de manifiesto la necesidad de encontrar un equilibrio entre el crecimiento del sector y la sostenibilidad económica de la región. La presión sobre los recursos naturales y la infraestructura en destinos turísticos populares ha llevado a un aumento de las protestas ciudadanas en lugares como Barcelona, donde los residentes han expresado su preocupación por el impacto del turismo masivo en su calidad de vida.
### La Búsqueda de Alternativas
Ante la creciente preocupación por la dependencia del turismo, algunos economistas y líderes de opinión han comenzado a abogar por un enfoque más diversificado en la economía catalana. La idea es fomentar el desarrollo de sectores alternativos, como la industria, que puedan ofrecer empleos más estables y menos vulnerables a las fluctuaciones del mercado turístico. Esta propuesta no solo busca reducir la dependencia del turismo, sino también mejorar la calidad del empleo en la región.
El debate sobre la fiscalidad del turismo en Catalunya es un reflejo de las tensiones entre el crecimiento económico y la sostenibilidad. A medida que la economía catalana enfrenta desafíos como la baja productividad y la burocracia excesiva, es crucial que se explore un enfoque equilibrado que permita el crecimiento del turismo sin comprometer el bienestar de los residentes y la salud económica a largo plazo de la región.
La discusión está lejos de resolverse, y es probable que continúe siendo un tema candente en los próximos meses. Las decisiones que se tomen en este ámbito no solo afectarán al sector turístico, sino que también tendrán repercusiones en la economía en su conjunto, en la calidad de vida de los ciudadanos y en la imagen de Catalunya como destino turístico. La búsqueda de un modelo económico más sostenible y diversificado será clave para el futuro de la región.
