El Arenas de Getxo celebra su reciente ascenso a la Primera RFEF, un logro que marca un hito en la historia del club. Con la emoción aún palpable tras el ascenso, la dirección del club ya se encuentra en plena planificación para la próxima temporada, buscando mantener un bloque competitivo que pueda afrontar los retos de la nueva categoría. Óscar Sampayo, director deportivo del Arenas, ha compartido algunos detalles sobre la situación actual del equipo y sus planes para el futuro.
La plantilla del Arenas ha llegado a un punto de inflexión, ya que todos los jugadores han finalizado sus contratos. Esta situación ha generado cierta incertidumbre, especialmente en torno a la continuidad de figuras clave como Ibai Gómez, quien se reunirá con Sampayo la próxima semana. El director deportivo ha dejado claro que la política del club es renovar año a año, lo que significa que cada jugador debe ganarse su lugar en el equipo. Esta estrategia ha sido parte de la filosofía del Arenas, que busca evitar compromisos a largo plazo que puedan poner en riesgo la estabilidad financiera del club.
Sampayo ha indicado que, aunque no se han mencionado nombres específicos, hay varios futbolistas que han desempeñado un papel importante en la temporada pasada y que el club está interesado en renovar. Sin embargo, también ha señalado que aquellos jugadores que han tenido menos minutos en el campo, como Daiki Niwa y Jon Trincado, probablemente no continuarán en el equipo. La dirección deportiva está en un proceso de evaluación para determinar qué jugadores se quedarán y cuáles no, basándose en el rendimiento y las necesidades del equipo.
El director deportivo ha enfatizado la importancia de mantener un estilo de juego atractivo que ha logrado atraer a numerosos aficionados al estadio de Gobela. La idea es seguir construyendo sobre la base de un fútbol que no solo sea efectivo, sino que también entretenga a los seguidores. Este enfoque se alinea con la visión del entrenador, quien también está en proceso de crecimiento personal y profesional.
Para confeccionar una plantilla competitiva en la Primera RFEF, el Arenas deberá realizar un esfuerzo económico significativo. Sampayo ha estimado que el desembolso necesario para fichajes y renovaciones será de poco más de medio millón de euros, lo que representa un aumento considerable respecto a los 220,000 euros destinados esta temporada. Este incremento es necesario para cumplir con los estándares salariales de la nueva categoría, donde se espera que el salario mínimo oscile entre 22,000 y 25,000 euros.
La planificación financiera del club será crucial para asegurar que se tomen decisiones acertadas en el mercado de fichajes. Sampayo ha subrayado la importancia de ser estratégicos en la selección de jugadores, dado que la Primera RFEF es una categoría profesional que exige un alto nivel de competencia. Aunque el club priorizará el mercado vasco para sus fichajes, no se cerrarán las puertas a otras oportunidades que puedan surgir en el mercado nacional o internacional.
El director deportivo ha manifestado su confianza en que el presupuesto se ajustará adecuadamente y que el club podrá seguir adelante con su plan de crecimiento. La clave será encontrar el equilibrio entre la inversión en nuevos talentos y la retención de los jugadores que han demostrado su valía en el campo. La próxima temporada será un desafío, pero el Arenas está decidido a afrontar este nuevo capítulo con determinación y ambición.
Con la temporada 2025-2026 a la vista, el Arenas se encuentra en un momento crucial de su historia. La combinación de un equipo renovado, una dirección deportiva comprometida y un estilo de juego atractivo podría ser la fórmula perfecta para consolidar su posición en la Primera RFEF y seguir creciendo como club. La afición espera con ansias las decisiones que se tomarán en las próximas semanas, mientras el equipo se prepara para un nuevo y emocionante desafío en el fútbol español.