La medicina privada ha experimentado un notable crecimiento en España, alcanzando un 41% de todas las cirugías realizadas en el país. En Euskadi, alrededor de 525.000 personas han optado por complementar su atención médica a través de seguros privados, lo que representa un 20% de la población. Esta cifra, aunque significativa, se sitúa seis puntos por debajo de la media nacional, que es del 26%. Las comunidades autónomas que lideran esta tendencia son Madrid, Cataluña y Baleares, donde la penetración de seguros privados es considerablemente mayor.
El informe de la Fundación IDIS, titulado «Observatorio sector sanitario privado 2025», destaca la creciente demanda de seguros médicos privados, impulsada por las dificultades de acceso a los servicios de salud públicos. Las especialidades más solicitadas en el ámbito privado son traumatología y oftalmología, que son conocidas por tener largas listas de espera. Además, las consultas con especialistas y las pruebas diagnósticas son los servicios más requeridos, con un 89% y un 62% respectivamente.
La percepción de agilidad en el acceso a servicios médicos y la posibilidad de elegir centros de hospitalización son factores que han llevado a que uno de cada cuatro vascos cuente con un seguro privado. Juan Abarca, presidente de la Fundación IDIS, subraya la importancia del sector privado en el sistema de salud, afirmando que su contribución al sistema público es innegable.
En Euskadi, el Igualatorio Médico Quirúrgico (IMQ) se posiciona como la aseguradora líder, brindando cobertura a más de 388.000 personas. Este seguro es especialmente popular en Bizkaia, donde aproximadamente el 30% de la población tiene una póliza. Con casi 91 años de historia, el IMQ se ha consolidado como una opción preferida, ofreciendo acceso a un amplio cuadro médico y a las principales clínicas privadas de la región.
El sector privado en Euskadi cuenta con 19 hospitales, que representan el 48% del total, y 2.012 camas, lo que equivale al 26% del total de camas disponibles. Sin embargo, estas cifras son significativamente inferiores a las de comunidades como Cataluña, Madrid y Andalucía, que tienen una mayor concentración de camas privadas.
En cuanto a las estadísticas recientes, el Eustat ha informado que en 2023 se registró un aumento del 4% en el número de vascos con seguro privado en comparación con 2021. Además, las primas recaudadas alcanzaron los 398 millones de euros, lo que representa un incremento del 8,7%. En términos de gasto sanitario, los vascos gastan un promedio de 742 euros en atención médica privada, ligeramente por encima de la media estatal de 728 euros.
El perfil de los asegurados muestra que las mujeres representan el 53% del total, mientras que los hombres constituyen el 47%. El grupo de edad más representado es el de 45 a 64 años, que abarca un 34,8% de los asegurados, seguido por el grupo de 25 a 44 años, que representa el 26%. Esta tendencia se mantiene en la mayoría de las franjas de edad, excepto en la pediátrica, donde los hombres superan a las mujeres.
Las consultas más demandadas en el sector privado incluyen traumatología, oftalmología, obstetricia, ginecología y dermatología, que en conjunto representan el 44% de las consultas. Las consultas de atención primaria, como medicina de familia y pediatría, ocupan un lugar secundario en la lista de demandas.
Los seguros colectivos, que agrupan a empleados de empresas y otros colectivos, han visto un aumento significativo en el número de asegurados, representando el 61% del total. En comparación con 2021, este tipo de seguros ha sido el que más ha crecido. A pesar de esto, el gasto sanitario privado en Euskadi sigue siendo inferior al de comunidades como Madrid, donde el gasto per cápita alcanzó los 907 euros el año pasado.
El informe también destaca el papel crucial del sector privado en la atención sanitaria, con 431 hospitales privados que representan el 56% del total y 49.837 camas, lo que equivale al 31% del total de camas disponibles. A pesar de la disminución en el número de asegurados en el sistema de mutualismo administrativo, Abarca enfatiza la necesidad de la sanidad privada para abordar problemas como las largas listas de espera, que se han visto exacerbadas desde la pandemia. Además, el sector privado juega un papel fundamental en la atención de la salud mental y en el ámbito sociosanitario, concentrando el 70% de los hospitales especializados en salud mental y el 73% de las plazas en residencias de mayores.