La popularidad de las motos ha ido en aumento en los últimos años, especialmente en entornos urbanos donde el tráfico y la falta de estacionamiento son desafíos constantes. Con un incremento del 7% en las ventas de motos en el primer trimestre de 2025 en comparación con el mismo periodo del año anterior, es evidente que cada vez más personas optan por este medio de transporte. Además de ser una opción más económica, con un ahorro estimado de 500 euros al año en comparación con un coche, las motos ofrecen una mayor agilidad y facilidad para aparcar. Sin embargo, conducir una moto en la ciudad conlleva ciertos riesgos que es fundamental tener en cuenta para garantizar la seguridad del motorista.
### Equipamiento y Precauciones Básicas
La seguridad es la prioridad número uno al conducir una moto. La primera recomendación es utilizar una equipación adecuada, sin importar la distancia del trayecto. El casco es el elemento más crítico; debe ser homologado y de la talla correcta para ofrecer la máxima protección. Además, es aconsejable llevar una chaqueta con protecciones, guantes, botas o calzado cerrado, y pantalones resistentes. Esta equipación puede marcar la diferencia en caso de un accidente.
Otro aspecto crucial es la visibilidad. Usar los intermitentes con antelación es esencial para que otros conductores anticipen nuestros movimientos. Un chaleco reflectante también puede ser una buena adición, especialmente en condiciones de poca luz. La velocidad es otro factor determinante en la seguridad vial; es vital respetar los límites de velocidad y adaptarlos según las condiciones del tráfico. Además, utilizar los retrovisores de manera constante y girar ligeramente la cabeza para verificar el entorno puede ayudar a evitar accidentes.
Es importante también tener en cuenta la forma de detenerse en un semáforo. Parar a un lado del carril, en lugar de en el centro, puede prevenir colisiones con vehículos que vienen detrás. Mantener una distancia de seguridad adecuada con el vehículo que nos precede es fundamental para anticipar cualquier frenada inesperada. Asimismo, evitar situarse en el ángulo muerto de otros vehículos es una práctica que puede salvar vidas.
### Atención a Peatones y Elementos Urbanos
Los peatones son uno de los principales riesgos para los motoristas en la ciudad. Es crucial estar atentos a sus movimientos, ya que pueden cruzar repentinamente o bajar de un autobús sin previo aviso. Los pasos de peatones y las marcas viales pueden ser peligrosos, especialmente si se atraviesan a alta velocidad. Pasar por ellos con suavidad y sin aceleraciones bruscas es la mejor manera de evitar deslizamientos.
Además, los elementos urbanos como alcantarillas mal colocadas, baches y suciedad en la carretera pueden ser trampas mortales para los motoristas. Es recomendable estar siempre alerta y evitar cualquier distracción que pueda llevar a perder el control de la moto. Las manchas de aceite en la carretera son especialmente resbaladizas y deben ser evitadas a toda costa.
### Mantenimiento y Seguro Obligatorio
El mantenimiento regular de la moto es esencial para garantizar su correcto funcionamiento y seguridad. Esto incluye revisar la presión de los neumáticos, asegurándose de que estén fríos al momento de la medición, y verificar la profundidad de la banda de rodadura. También es importante comprobar el engrase y tensado de la cadena, así como limpiar la suciedad acumulada cada 500 kilómetros. La tensión de la cadena se puede verificar fácilmente con un destornillador, lo que permite realizar ajustes necesarios.
Además, es fundamental revisar las luces de la moto, incluyendo las de cruce, freno trasero, largas, intermitentes y el claxon. También se deben chequear los niveles de aceite, líquido de frenos y refrigerante, así como el desgaste de las pastillas de freno. Un mantenimiento adecuado no solo prolonga la vida útil de la moto, sino que también puede prevenir accidentes.
Por último, contar con un seguro es obligatorio y esencial. Un accidente puede ocurrir en cualquier momento, y tener un seguro adecuado puede proporcionar tranquilidad. Dependiendo del uso que se le dé a la moto, se puede optar por un seguro a todo riesgo que cubra tanto daños a terceros como daños propios. Es recomendable incluir coberturas adicionales como asistencia en viaje y accidentes del conductor en la póliza para una mayor protección.
Conducir una moto en la ciudad puede ser una experiencia gratificante y eficiente, siempre que se sigan las recomendaciones de seguridad y mantenimiento. La preparación y la precaución son claves para disfrutar de este medio de transporte sin poner en riesgo nuestra integridad ni la de los demás.