Un apagón eléctrico inesperado puede ser un inconveniente que se soluciona rápidamente, pero cuando se trata de un apagón a gran escala, la situación puede volverse caótica. Este fue el caso del apagón que afectó a España el 28 de abril de 2025, un evento que dejó a millones de personas sin electricidad y generó incertidumbre sobre cómo manejar los alimentos almacenados en frigoríficos y congeladores. A continuación, se presentan recomendaciones clave para evitar el desperdicio de comida y garantizar la seguridad alimentaria tras un corte de luz prolongado.
### Estrategias para Proteger los Alimentos Durante un Apagón
La primera recomendación es mantener la calma y entender que no todos los alimentos se deterioran al mismo ritmo. Según el catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad de Córdoba, Antonio Valero, hay diferencias significativas entre los productos almacenados en la nevera y aquellos en el congelador. En la nevera, la temperatura óptima se sitúa entre 1 y 4 °C. Si el apagón dura más de 4 horas, los alimentos pueden entrar en una zona de peligro térmico (por encima de 5 °C), donde las bacterias comienzan a multiplicarse rápidamente. Por otro lado, los alimentos en el congelador pueden resistir hasta 24 o incluso 48 horas si la puerta permanece cerrada.
Una de las acciones más importantes es evitar abrir el congelador. Abrir la puerta permite que el aire frío escape, lo que acelera el deterioro de los alimentos. Un truco útil es colocar un vaso con agua congelada y una moneda encima dentro del congelador. Si, después del apagón, la moneda se encuentra en el fondo del vaso, significa que el hielo se ha derretido completamente y los alimentos pueden no ser seguros para el consumo.
### Clasificación y Manejo de Alimentos Tras el Apagón
Una vez que la electricidad regresa, es crucial hacer un inventario rápido de los alimentos en el frigorífico y el congelador. Clasifica los productos según su fecha de caducidad y prioriza el consumo de los más perecederos, como carnes, pescados y productos lácteos. Los alimentos abiertos, platos preparados y lácteos son los que deben revisarse primero. En cambio, los embutidos curados y quesos duros tienen más margen de seguridad.
Si encuentras alimentos que aún tienen cristales de hielo visibles y se han mantenido fríos, puedes volver a congelarlos sin riesgos. Sin embargo, si los alimentos están completamente descongelados y han estado a temperatura ambiente durante varias horas, es mejor cocinarlos lo antes posible y luego congelarlos nuevamente como platos preparados. Esto no solo ayuda a evitar el desperdicio, sino que también reduce el riesgo de intoxicación alimentaria.
### Consejos Adicionales para Minimizar el Desperdicio
Una de las mejores maneras de evitar el desperdicio tras un apagón es cocinar lo que todavía se pueda aprovechar. Si recuperas la electricidad a tiempo y tienes alimentos que están algo descongelados pero en buen estado, prepáralos cuanto antes. Por ejemplo, si tenías carne picada, puedes hacer albóndigas o boloñesa y congelar las raciones ya cocinadas. Las verduras pueden transformarse en cremas, pisto o salteados, mientras que los pescados pueden ser cocinados al horno o a la plancha.
Si tienes dudas sobre la seguridad de un alimento, es mejor errar por el lado de la precaución y desecharlo. La intoxicación alimentaria puede causar problemas serios, especialmente en personas vulnerables como niños, ancianos o personas con sistemas inmunológicos comprometidos. Por lo tanto, si un alimento tiene una fecha de caducidad próxima o su envase está dañado, es recomendable desecharlo.
### Resumen de Pasos a Seguir Tras un Apagón
Para manejar adecuadamente los alimentos tras un apagón eléctrico, sigue estos pasos:
1. No abras el congelador bajo ningún concepto.
2. Haz un inventario rápido de los alimentos en cuanto vuelva la luz.
3. Prioriza el consumo de alimentos más perecederos.
4. No vuelvas a congelar nada que haya estado horas a temperatura ambiente.
5. Cocina lo que se pueda salvar para aprovecharlo.
6. Si hay dudas sobre la seguridad de un alimento, es mejor tirarlo que arriesgarse.
Un apagón, como el que ocurrió recientemente en España, puede causar desconcierto, pero siguiendo estos pasos puedes minimizar las pérdidas y proteger la salud de tu familia.