En los últimos años, el panorama político de Estados Unidos ha estado marcado por una creciente polarización y tensiones que han llevado a muchos ciudadanos, incluidos rostros conocidos, a replantearse su futuro en el país. La figura de Donald Trump, en particular, ha generado reacciones intensas, y varios artistas han decidido abandonar Estados Unidos en busca de un entorno más estable y seguro. Este fenómeno ha captado la atención de la opinión pública, ya que revela cómo la política puede influir en decisiones personales y profesionales.
La decisión de mudarse al extranjero no es solo una cuestión de preferencia personal, sino que también refleja un deseo de escapar de un clima político que muchos consideran tóxico. Jimmy Kimmel, el popular presentador de televisión, ha sido uno de los más vocales en expresar su descontento. Recientemente, Kimmel reveló que ha obtenido la ciudadanía italiana y está considerando mudarse a Europa, especialmente tras la posibilidad de un segundo mandato de Trump. En sus declaraciones, Kimmel enfatizó que la situación ha empeorado más de lo que esperaba, lo que resuena con muchos ciudadanos que sienten que su país se ha vuelto un lugar hostil.
Ellen DeGeneres y Portia de Rossi también han tomado la decisión de mudarse al Reino Unido. La pareja se trasladó justo antes de las elecciones de 2024, buscando un refugio donde pudieran esperar los resultados en un ambiente más tranquilo. DeGeneres ha compartido que la vida en el campo británico les ofrece una distancia saludable de la agitación política en Estados Unidos. Además, como activista LGBTQ, ha expresado su preocupación por los intentos de revocar los derechos que han logrado en su país, lo que añade una capa de urgencia a su decisión de permanecer en el extranjero.
La mudanza de Rosie O’Donnell a Irlanda es otro ejemplo de cómo la política está influyendo en la vida de las celebridades. O’Donnell ha sido clara al afirmar que su decisión de mudarse es una cuestión de supervivencia emocional. En su opinión, el ambiente en Estados Unidos se ha vuelto hostil, y su traslado a Irlanda representa una búsqueda de un entorno más seguro para ella y su familia. La presentadora ha estado tramitando su ciudadanía irlandesa, lo que subraya su compromiso con esta nueva etapa de su vida.
Sophie Turner, conocida por su papel en ‘Juego de Tronos’, también ha decidido regresar a Londres tras su separación de Joe Jonas. Aunque su motivación principal es familiar, Turner ha expresado su preocupación por el clima hostil en Estados Unidos, lo que la ha llevado a optar por criar a sus hijas en un entorno más estable. La actriz ha dejado claro que no tiene planes de regresar a su país natal, lo que refleja un sentimiento compartido por muchos que buscan escapar de la polarización política.
Courtney Love ha compartido sentimientos similares, manifestando su deseo de dejar Estados Unidos debido a la creciente incomodidad que siente bajo la influencia de Trump. Aunque su mudanza fue menos mediática, Love ha encontrado en Londres un ambiente cultural más acogedor y menos contaminado por la polarización política. Su experiencia resuena con aquellos que buscan un cambio de escenario en medio de la incertidumbre.
Eva Longoria, aunque ha declarado que su mudanza a España y México se debe a proyectos profesionales, también ha expresado su preocupación por el futuro del país bajo la administración de Trump. Longoria ha advertido que Estados Unidos podría convertirse en un lugar aterrador si se cumplen ciertas promesas políticas, lo que añade un matiz a su decisión de vivir en el extranjero. A pesar de su enfoque profesional, su ansiedad por la situación política refleja un sentimiento más amplio entre aquellos que han optado por dejar el país.
No todos los artistas han decidido mudarse, pero muchos han optado por no visitar Estados Unidos mientras persista la incertidumbre política. El pianista András Schiff, por ejemplo, ha cancelado su gira por el país, sintiéndose moralmente obligado a hacerlo en respuesta a las políticas migratorias de la administración Trump. Su decisión resalta cómo la política puede influir en la vida profesional de los artistas, llevándolos a tomar decisiones que van más allá de lo personal.
Este fenómeno de expatriación entre celebridades estadounidenses pone de relieve la intersección entre la política y la vida cotidiana. A medida que la polarización y la tensión continúan en el país, es probable que más figuras públicas consideren la posibilidad de buscar refugio en el extranjero. La búsqueda de un entorno más seguro y civilizado es un reflejo de la ansiedad que muchos sienten ante un futuro incierto, y la decisión de mudarse se convierte en una forma de resistencia personal ante un clima político que muchos consideran insostenible.