La economía española ha experimentado un cambio notable en la tendencia de la inflación, que ha mostrado una ligera moderación en abril de 2025. Tras un inicio de año marcado por un aumento en los precios, la tasa de inflación se ha reducido en una décima, situándose en un 2,2%. Este descenso se atribuye principalmente a la caída en los precios de la energía, que incluye tanto la electricidad como el gas, así como a la disminución de los precios de los carburantes. Este fenómeno ha sido confirmado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que publicó datos que sorprendieron a algunos economistas, quienes esperaban una reducción más significativa.
El impacto de la Semana Santa en los precios de los servicios ha sido notable. A pesar de la caída en los precios de la energía, el sector servicios, especialmente el turismo, ha visto un aumento en sus precios, lo que ha contrarrestado la moderación general de la inflación. Los paquetes turísticos nacionales, por ejemplo, han aumentado un 17,2% en comparación con el mismo mes del año anterior, mientras que los precios de los restaurantes y la hostelería han subido un 4,5%. Fernando Gómez, economista de Funcas, ha señalado que esta tendencia al alza en los servicios ha sido inesperada, especialmente en comparación con el año anterior.
### Análisis de los Precios de Alimentos y Energía
En el ámbito de los alimentos, se ha observado una moderación en los precios, que han disminuido cuatro décimas, alcanzando un 2%. Este cambio pone fin a dos meses consecutivos de aumentos en los precios de la alimentación, lo que sugiere una posible normalización tras la espiral inflacionista que se vivió hace dos años, cuando los precios alcanzaron tasas cercanas al 17% interanual. Uno de los productos que ha destacado en este contexto es el aceite de oliva, que ha visto una caída de su precio del 42,2% en abril, marcando la mayor reducción interanual en la historia. Sin embargo, es importante señalar que, a pesar de esta caída, el precio del aceite de oliva ha aumentado un 76,3% desde enero de 2021.
Otros alimentos también han experimentado descensos significativos en sus precios. El azúcar, por ejemplo, ha disminuido un 17%, y los combustibles líquidos han caído un 14,2%. La gasolina y el gasóleo también han visto reducciones en sus precios, del 11,7% y 9,9% respectivamente. Sin embargo, no todos los productos han seguido esta tendencia a la baja. El chocolate ha registrado un aumento del 24,2%, mientras que los precios de los vuelos nacionales e internacionales han subido un 21,3% y 17,8% respectivamente.
### Perspectivas Futuras de la Inflación
A pesar de la moderación en la inflación general, el índice de precios subyacente, que excluye los precios de la energía y los alimentos frescos, ha aumentado cuatro décimas, alcanzando un 2,4%. Este indicador es considerado más fiable para evaluar las tendencias de fondo en los precios y se sitúa en niveles similares a los que se registraron a finales de 2024 y principios de 2025. Esto sugiere que, aunque hay una moderación en algunos sectores, las presiones inflacionarias siguen presentes en otros.
Las proyecciones para el futuro indican que la inflación general se mantendrá por encima del 2% durante el resto del año, y no se espera que baje de esta tasa hasta 2026. Este escenario está influenciado por varios factores, incluidos los precios de la energía, las tensiones en el comercio internacional y el impacto del aumento del poder adquisitivo debido a los incrementos salariales. La interacción de estos elementos podría complicar aún más la situación económica, haciendo que la moderación de la inflación sea un desafío continuo para los responsables de la política económica.
En resumen, aunque abril ha traído consigo una ligera mejora en la inflación, los datos revelan una complejidad en la dinámica de precios que requiere atención. La combinación de descensos en algunos sectores y aumentos en otros sugiere que la economía española sigue enfrentando retos significativos en su camino hacia la estabilidad.