El 1 de mayo se ha convertido en una fecha emblemática para la clase trabajadora en Europa, un día en el que se conmemoran las luchas históricas por derechos laborales y se reivindican mejoras en las condiciones de trabajo. Este año, la UGT (Unión General de Trabajadores) ha hecho un llamado a la movilización, enfatizando la necesidad de defender el trabajo digno, la democracia y los derechos humanos en un contexto de creciente incertidumbre global. La situación actual, marcada por políticas comerciales agresivas y proteccionistas, exige una respuesta firme y unida desde Europa.
### La Importancia de un Mercado Interior Fuerte
El mercado interior europeo, que agrupa a 450 millones de consumidores, se presenta como la primera línea de defensa ante las amenazas externas. Sin embargo, su fortaleza depende de la dignidad de sus trabajadores. La UGT sostiene que la dignificación de los salarios no es solo una cuestión de justicia social, sino una necesidad estratégica para garantizar un consumo interno robusto y una economía resiliente. Para ello, es fundamental establecer un Salario Mínimo Interprofesional que alcance al menos el 60% del salario medio, tal como lo establece la Carta Social Europea.
La movilización del 1 de mayo debe ser un grito de unidad en toda Europa, donde se exija el respeto a los derechos laborales y se defienda el Estado del Bienestar. La UGT llama a todos los trabajadores a alzar la voz contra quienes buscan desmantelar estos derechos fundamentales. La lucha por salarios dignos es, en última instancia, una lucha por una Europa más fuerte y más justa.
### Retos Internos y la Amenaza de la Extrema Derecha
Sin embargo, la defensa de los derechos laborales en Europa no solo enfrenta desafíos externos. Desde dentro del continente, la extrema derecha ha comenzado a ganar terreno, promoviendo políticas que amenazan los valores fundamentales de la democracia y el respeto a la dignidad humana. Estas fuerzas políticas, que han encontrado eco en varios países, buscan desestabilizar el tejido social y económico que ha costado décadas construir.
La UGT advierte que fortalecer el mercado interior no solo implica mejorar las condiciones laborales, sino también reforzar la autonomía estratégica de Europa. En este sentido, se hace un llamado a potenciar las energías renovables y avanzar en la digitalización, asegurando que estas herramientas se utilicen para el beneficio de las personas y no para su explotación. La inteligencia artificial, por ejemplo, debe desarrollarse de manera ética, priorizando los derechos laborales y la dignidad de los trabajadores.
El 1 de mayo no es solo un día de conmemoración; es un día de lucha y compromiso. La UGT reafirma su compromiso de trabajar por una Europa más democrática, social y soberana. La defensa de los derechos de los trabajadores es, en última instancia, la defensa del futuro de Europa. La clase trabajadora debe unirse para construir una respuesta sólida frente a quienes intentan arrebatarles sus derechos y su bienestar.
La celebración del 1 de mayo debe ser un recordatorio de que la lucha por la dignidad laboral es una lucha colectiva. La UGT invita a todos a participar en las movilizaciones y a hacer oír su voz en defensa de un futuro más justo y equitativo para todos. La dignidad, la justicia y la solidaridad deben seguir siendo los pilares de la Europa que queremos construir. ¡Feliz 1 de mayo! ¡Viva la clase trabajadora!