La Casa Real de Tailandia ha anunciado con profundo pesar el fallecimiento de la reina madre Sirikit, quien fue una figura emblemática en la historia reciente del país. La regente, madre del actual rey Maha Vajiralongkorn (Rama X), falleció en un hospital de Bangkok a las 21:21 hora local del viernes, tras haber estado hospitalizada desde 2019 debido a complicaciones de salud, incluyendo una infección de sangre que se presentó este mes. Su muerte marca el fin de una era para la monarquía tailandesa, que ha estado bajo su influencia durante más de seis décadas.
La reina Sirikit estuvo casada con el rey Bhumibol Adulyadej, quien falleció en 2016 y fue el monarca con el reinado más largo en la historia de Tailandia. Desde 2012, las apariciones públicas de Sirikit se habían vuelto escasas, especialmente después de sufrir un derrame cerebral. Sin embargo, su legado perdura en la memoria colectiva del pueblo tailandés, que la recuerda por su dedicación y su papel en el fortalecimiento de la monarquía en tiempos de crisis.
La noticia de su fallecimiento ha provocado una ola de duelo en todo el país. Un grupo de mujeres se congregó a las puertas del Hospital Chulalongkorn, donde la reina madre había estado ingresada. Una de ellas, vestida de negro y entre sollozos, expresó su dolor: «No estábamos preparadas para esto… Si nuestro corazón está destrozado, ¿cómo estará Su Majestad?», refiriéndose al rey Vajiralongkorn, quien asumió el trono tras la muerte de su padre.
En respuesta a la tragedia, los medios de comunicación y las entidades públicas han cambiado sus portales a blanco y negro como símbolo de luto. El canal público Thai PBS 3, por ejemplo, ha estado transmitiendo la noticia en este formato. Además, se ha solicitado a los tailandeses que vistan de oscuro durante un periodo de tres meses como muestra de respeto.
El académico tailandés Pavin Chachavalpongpun, profesor en la Universidad de Kioto, recordó en una publicación en redes sociales el papel crucial que desempeñó Sirikit en la consolidación de la monarquía durante un periodo de agitación política. Según Pavin, la supervivencia de la monarquía estaba intrínsecamente ligada a la supervivencia de la nación, especialmente durante la Guerra Fría.
El cuerpo de la reina madre será trasladado al Gran Palacio de Bangkok, donde permanecerá hasta que se realicen los ritos funerarios, cuya fecha aún no ha sido anunciada. En un gesto de respeto, Anutin, un alto funcionario del gobierno tailandés, ha solicitado que se adelante la ceremonia de firma de un acuerdo de paz entre Tailandia y Camboya, programada para el domingo, para que el presidente estadounidense, Donald Trump, pueda asistir a la procesión del cuerpo de la difunta reina madre.
La reina madre Sirikit no solo fue una figura central en la monarquía tailandesa, sino que también dejó un legado en diversas áreas, incluyendo la cultura y el bienestar social. Su trabajo en la promoción de la cultura tailandesa y su apoyo a iniciativas de desarrollo rural han sido ampliamente reconocidos. A lo largo de su vida, Sirikit se dedicó a mejorar la calidad de vida de los tailandeses, especialmente en áreas rurales, donde su influencia fue notable.
La reina madre también fue conocida por su estilo elegante y su amor por la moda, lo que la convirtió en un ícono de la cultura tailandesa. Su imagen ha sido utilizada en diversas campañas de promoción turística y cultural, y su legado perdurará en la memoria de aquellos que la admiraron y respetaron.
La muerte de la reina madre Sirikit representa una pérdida significativa para el pueblo tailandés, que ha estado profundamente conectado con la monarquía a lo largo de su historia. Su vida y su legado seguirán siendo recordados por generaciones, y su contribución a la sociedad tailandesa será difícil de igualar. En este momento de duelo, el país se une para rendir homenaje a una de sus figuras más queridas y respetadas, mientras se prepara para los ritos funerarios que marcarán el final de una era en la historia de Tailandia.
