La localidad de Guissona se ha convertido en un referente en el ámbito económico gracias a BonÀrea, un conglomerado que incluye una cooperativa, una empresa y una entidad financiera. Este modelo de negocio se distingue por su enfoque integral, que abarca desde la producción agrícola hasta la comercialización de productos alimenticios, pasando por la formación de personal y la responsabilidad social. En este artículo, exploraremos los aspectos más destacados de BonÀrea y su impacto en la comunidad.
### Un Modelo de Negocio Sostenible y Eficiente
BonÀrea se caracteriza por un modelo de negocio que se fundamenta en la producción local y la sostenibilidad. La cadena de valor comienza en la tierra, donde se cultivan los alimentos, y se extiende hasta el gran centro de procesamiento de carne, que asegura la calidad y frescura de los productos. Este enfoque no solo beneficia a los consumidores, sino que también proporciona un impulso económico a la región, creando empleos y fomentando la autonomía local.
En el año 2024, BonÀrea realizó una inversión significativa de 118 millones de euros, lo que demuestra su compromiso con el desarrollo económico de Guissona y sus alrededores. La empresa ha sido pionera en la implementación de la formación profesional dual, un modelo educativo que combina la enseñanza teórica con la práctica en el lugar de trabajo. Cada año, BonÀrea capacita a aproximadamente 150 personas, de las cuales un 75% logra incorporarse a la plantilla, lo que subraya su papel como motor de empleo en la región.
Los resultados económicos de BonÀrea son igualmente impresionantes. En el último ejercicio, la empresa reportó ganancias cercanas a los 89 millones de euros después de impuestos, distribuyendo 12,7 millones entre sus accionistas, muchos de los cuales son también socios de la cooperativa. Con un balance total de 1.300 millones de euros, la solidez financiera de BonÀrea es un testimonio de su éxito y sostenibilidad a largo plazo.
### Compromiso Social y Responsabilidad
Más allá de su éxito económico, BonÀrea se destaca por su compromiso con la acción social. La empresa ha obtenido la certificación “Residuo Cero” de AENOR, lo que refleja su dedicación a prácticas sostenibles y responsables. Además, ha establecido una red de formación en los municipios cercanos, donde se enseña a los estudiantes de primaria y secundaria sobre tecnología de robotización a través de LEGO Education. Esta iniciativa no solo promueve la educación en áreas tecnológicas, sino que también prepara a las futuras generaciones para un mercado laboral en constante evolución.
BonÀrea también ha creado una residencia y centro social en Guissona, que sirve como sede de su fundación. Este espacio no solo proporciona servicios a la comunidad, sino que también actúa como un punto de encuentro para diversas iniciativas sociales. La empresa ha demostrado su capacidad para integrar laboralmente a inmigrantes, brindándoles oportunidades y recursos para establecerse en la región. Este enfoque inclusivo es fundamental para el desarrollo social y económico de Guissona.
Sin embargo, a pesar de sus logros, los directivos de BonÀrea son conscientes de que el modelo actual presenta desafíos. La empresa ha sido criticada por depender de un modelo intensivo en mano de obra con salarios relativamente bajos. Aunque ha habido un aumento en la proporción de empleados con títulos superiores, que ha pasado del 10% al 15% en los últimos 15 años, el salario medio de 26.200 euros sigue siendo un punto de preocupación. Los directivos reconocen que el futuro de BonÀrea dependerá de la robotización de sus procesos, lo que podría mejorar la eficiencia y la calidad del trabajo, al tiempo que se abordan las preocupaciones sobre la sostenibilidad social del modelo actual.
En resumen, BonÀrea es un ejemplo de cómo un modelo de negocio puede ser exitoso y responsable al mismo tiempo. Su enfoque en la producción local, la formación de personal y la acción social ha permitido a la empresa prosperar en un entorno competitivo. A medida que se enfrenta a los desafíos del futuro, la capacidad de BonÀrea para adaptarse y evolucionar será crucial para su éxito continuo y su impacto positivo en la comunidad de Guissona.
