La historia de Gemma Mengual, una de las figuras más emblemáticas de la natación sincronizada en España, es un testimonio de la lucha y la resiliencia de las mujeres en el deporte. En una reciente entrevista, Mengual compartió su experiencia sobre la discriminación que enfrentó tras convertirse en madre, un hecho que la llevó a tomar la difícil decisión de retirarse de la competición profesional. Su relato no solo revela los desafíos que enfrentan las deportistas, sino que también destaca la necesidad de un cambio en la percepción y el tratamiento de las madres en el ámbito deportivo.
La maternidad y el regreso al deporte
Gemma Mengual se convirtió en madre por primera vez en noviembre de 2010, cuando nació su hijo Nil. A pesar de su deseo de regresar a la natación sincronizada, se encontró con un entorno hostil que no estaba dispuesto a aceptar su nueva realidad como madre. «Me encontré con una situación que no me esperaba, porque tuve la sensación, y no solo yo, de que no era muy bienvenida», confesó Mengual. Esta percepción de rechazo fue un factor determinante en su decisión de retirarse del deporte.
La exdeportista relató que, a pesar de su vasta experiencia y logros en la natación, su regreso fue complicado. «Tuve la sensación de que no querían hacer excepciones conmigo, que no querían que dentro del equipo hubiese una madre», explicó. Esta falta de apoyo y comprensión por parte de su entorno deportivo la llevó a sentirse aislada y desmotivada. La presión de cumplir con las expectativas de un equipo que no estaba dispuesto a aceptar su nueva vida como madre fue abrumadora.
Mengual también mencionó que, a pesar de su deseo de seguir compitiendo, se sentía constantemente juzgada. «Iba a entrenar y me ignoraban, murmuraban sobre mi hijo y mi restaurante», comentó. Esta situación la llevó a tomar la difícil decisión de retirarse, un paso que consideró necesario para preservar su bienestar emocional y mental. «Era como si me pusieran palos en las ruedas. Y a mí me había costado mucho llegar, era muy feliz y no iba a permitir que nadie me amargase la vida. Así que me retiré», reflexionó.
La retirada y sus repercusiones
La decisión de Mengual de retirarse del deporte profesional no fue fácil. En 2015, después de no participar en los Juegos Olímpicos de Londres, anunció su despedida del mundo de la natación. Sin embargo, a pesar de su deseo de una despedida tranquila, la realidad de su situación era muy diferente. «Me tuve que callar muchas cosas, porque quería que fuese una despedida tranquila. Había mucha gente y muchos ya sabían por qué me retiraba», compartió.
Con el tiempo, Mengual ha llegado a reconocer que debió haber sido más vocal sobre las razones de su retirada. «Tenía que haber dicho: ‘Me retiro porque esta mujer o este cuerpo técnico no me quería'», admitió. Esta reflexión pone de manifiesto la presión que enfrentan las deportistas para mantener una imagen positiva, incluso cuando las circunstancias son adversas.
El caso de Mengual no es aislado. A lo largo de los años, otras deportistas han compartido experiencias similares de discriminación y falta de apoyo tras convertirse en madres. La situación de Gemma se agrava al considerar que, en su momento, no existían políticas claras que protegieran los derechos de las atletas que deseaban ser madres. Sin embargo, Mengual ha sido una voz importante en la lucha por el reconocimiento y la inclusión de las madres en el deporte.
Un mensaje de esperanza para futuras generaciones
A pesar de los desafíos que enfrentó, Mengual se muestra optimista respecto al futuro de las deportistas que desean ser madres. «No es un problema. Yo lo he hecho y tenía casi 40 años. Te puedes volver a poner en forma, puedes compaginarlo. Se puede hacer y se está viendo. Ahora hay muchas deportistas que están compitiendo después de ser madre y a muy alto nivel», afirmó con determinación.
Su mensaje es claro: la maternidad no debe ser un obstáculo para el éxito en el deporte. A medida que más mujeres se atreven a desafiar las normas y a buscar un equilibrio entre la maternidad y su carrera deportiva, se abre un camino hacia un futuro más inclusivo y equitativo en el ámbito deportivo. La historia de Gemma Mengual es un recordatorio de que, a pesar de las adversidades, la perseverancia y la pasión pueden llevar a las mujeres a alcanzar sus sueños, tanto en el deporte como en la vida personal.