El mercado inmobiliario en España está experimentando un crecimiento sin precedentes, con un aumento en los precios de la vivienda que no parece tener fin. Según las proyecciones de la Sociedad de Tasación, se espera que los precios de la vivienda aumenten un 8,7% para finales de 2025, superando las estimaciones anteriores que predecían un crecimiento del 5%. Este fenómeno se ha visto impulsado por una combinación de factores que han llevado a un incremento significativo en la demanda y, por ende, en los precios.
En junio de 2025, el precio medio de la vivienda nueva alcanzó los 3.151 €/m², marcando un récord histórico. Este aumento interanual del 7,5% es un claro indicador de la tendencia alcista que se está viviendo en el sector. Las proyecciones sugieren que, al cierre de 2025, el precio medio podría alcanzar los 3.291 €/m², lo que significaría un incremento absoluto de 329.100 euros para una vivienda de 100 metros cuadrados. Este crecimiento no solo refleja la dinámica del mercado, sino también la solidez de la demanda, que se ha visto reforzada por una oferta limitada y un entorno económico estable.
### Factores que Impulsan el Crecimiento del Mercado Inmobiliario
El aumento en la actividad del mercado inmobiliario se ha visto reflejado en el número de compraventas, que ha crecido un 15% en el primer cuatrimestre de 2025. Asimismo, la actividad hipotecaria ha aumentado un 18%, gracias a un entorno favorable para la concesión de hipotecas. Este dinamismo se puede atribuir a varios factores clave:
1. **Relajación de los Tipos de Interés**: La política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) ha permitido una disminución de los tipos de interés, que se espera que se sitúen por debajo del 2% a finales de 2025. Esto ha facilitado el acceso a la financiación para muchos compradores, lo que a su vez ha estimulado la demanda.
2. **Interés del Comprador Extranjero**: Desde 2023, los compradores extranjeros han representado alrededor del 15% de las compraventas de vivienda en España, con cifras que superan el 30% en mercados específicos como las Islas Baleares y Canarias. Este interés internacional ha añadido una capa adicional de competencia en el mercado, elevando aún más los precios.
3. **Proyecciones Demográficas**: Las proyecciones del Instituto Nacional de Estadística (INE) indican que para 2039 se alcanzarán los 23 millones de hogares en España. Este crecimiento demográfico, concentrado en provincias como Madrid, Barcelona y Valencia, intensificará la presión sobre la demanda de vivienda en los próximos años.
### Desigualdad en el Acceso a la Vivienda
A pesar del crecimiento del mercado, la situación no es homogénea. Existe una clara división en la demanda de vivienda, que se puede clasificar en dos segmentos. Por un lado, está la demanda solvente, compuesta por compradores con capacidad adquisitiva, muchos de los cuales son extranjeros. Este grupo se beneficia de los tipos de interés bajos y de la oferta limitada, lo que les permite competir en el mercado y presionar los precios al alza.
Por otro lado, hay una segunda bolsa de demanda que enfrenta serias dificultades para acceder a la vivienda. Este grupo incluye a jóvenes que buscan su primera propiedad, así como a una clase media que se siente cada vez más estrangulada por el aumento de precios. Según datos de la Sociedad de Tasación, solo uno de cada cuatro ocupados en España gana más que la media salarial, lo que limita su capacidad para adquirir vivienda. Además, el número de trabajadores con múltiples empleos ha aumentado un 30% desde la pandemia, lo que refleja la creciente precariedad económica.
La directora de Instituciones de la Sociedad de Tasación, Consuelo Villanueva, ha señalado que la creciente dificultad de acceso a la vivienda para la clase media es alarmante. La falta de políticas públicas efectivas que faciliten el acceso a la vivienda, como la movilización de suelo público o la construcción de vivienda protegida, está exacerbando esta situación. Aunque se han propuesto soluciones, se estima que los efectos de estas políticas tardarán al menos dos años en materializarse.
En resumen, el mercado inmobiliario español está en un momento crítico, con precios en constante ascenso y una demanda que se divide entre los que pueden acceder a la vivienda y aquellos que quedan excluidos. La combinación de factores económicos, demográficos y de política monetaria está configurando un panorama complejo que requerirá atención y acción por parte de los responsables políticos para garantizar un acceso equitativo a la vivienda en el futuro.