En los últimos meses, Cataluña ha mostrado un notable avance en la autorización de proyectos de instalaciones renovables, destacándose en un contexto nacional donde la tendencia es de desaceleración. Según el último informe del Observatorio de Energías Renovables de Foro Sella, elaborado por Opina 360, entre abril y junio de 2025 se aprobaron 25 proyectos que suman una potencia total de 372 MW. Esta cifra representa un incremento del 33% en comparación con el mismo periodo del año anterior, lo que posiciona a Cataluña como una de las pocas comunidades autónomas que escapan a la caída generalizada de permisos en España, donde las autorizaciones han disminuido un 40% en el primer semestre del año.
El director de Opina 360, Juan Francisco Caro, subraya que este crecimiento en Cataluña es significativo, especialmente considerando que en el segundo trimestre se registraron 201 MW de nuevos proyectos, lo que equivale a un aumento del 18% respecto al trimestre anterior. Este impulso en la energía renovable se debe en gran parte a la energía eólica, que ha liderado las autorizaciones en la región, con 134,8 MW aprobados, convirtiéndose en la principal fuente de generación renovable en Cataluña y a nivel nacional. Los restantes 66,2 MW corresponden a proyectos de energía fotovoltaica.
A pesar de estos datos positivos, es importante señalar que ni el primer ni el segundo trimestre de 2025 se acercan a los niveles alcanzados en el cuarto trimestre de 2024, cuando se aprobaron 657,2 MW. En el contexto nacional, Cataluña ocupó el sexto lugar en términos de potencia aprobada en el segundo trimestre, representando el 9% del total de 2.349 MW concedidos en toda España. Castilla-La Mancha lideró las autorizaciones con 559,7 MW, seguida de Andalucía con 434,1 MW y Aragón con 364,5 MW. Madrid también superó a Cataluña con 237,7 MW.
Las autorizaciones en Cataluña fueron otorgadas en su totalidad por la Generalitat, dado que los proyectos no superaron los 50 MW. Para aquellos que exceden esta cifra, la autorización depende del Ministerio de Transición Ecológica. Actualmente, hay 273 MW en tramitación en la región, distribuidos en 33 proyectos de energía fotovoltaica que están en fase de información pública. Este avance en la energía renovable se complementa con el crecimiento en proyectos de almacenamiento, donde Cataluña lidera en tramitación con 24 proyectos y ocupa el segundo lugar en potencia, con 362,5 MW, solo superada por la Comunidad Valenciana.
En el ámbito de los proyectos de almacenamiento, aunque no se ha concedido autorización administrativa previa a ninguno, se han publicado cinco declaraciones favorables en informes de impacto ambiental para un total de 123,7 MW. Sin embargo, se desestimó una planta fotovoltaica de 12,2 MW debido a una declaración desfavorable, lo que resalta la importancia de los estudios de impacto ambiental en la aprobación de proyectos.
El crecimiento de las energías renovables en Cataluña no solo es un reflejo de la política energética de la región, sino también una respuesta a la creciente demanda de fuentes de energía sostenibles. La transición hacia energías limpias es crucial para cumplir con los objetivos de reducción de emisiones y sostenibilidad a largo plazo. La capacidad de Cataluña para atraer inversiones en este sector es un indicador positivo de su compromiso con la sostenibilidad y la innovación.
A medida que se avanza en la implementación de estos proyectos, es fundamental que las autoridades continúen facilitando el proceso de autorización y que se mantenga un enfoque equilibrado entre el desarrollo económico y la protección del medio ambiente. La colaboración entre el gobierno, las empresas y la sociedad civil será clave para asegurar que Cataluña no solo cumpla con sus objetivos energéticos, sino que también se convierta en un modelo a seguir en la transición hacia un futuro más sostenible.
En resumen, Cataluña está en una posición privilegiada para liderar el camino hacia un futuro energético más verde. Con un aumento significativo en las autorizaciones de proyectos renovables y un enfoque proactivo en la tramitación de proyectos de almacenamiento, la región se está consolidando como un referente en el ámbito de las energías limpias en España. La combinación de políticas favorables, un marco regulatorio claro y un compromiso con la sostenibilidad son elementos que permitirán a Cataluña seguir avanzando en su transición energética.